"Ahora digo -dijo a esta sazón don Quijote- que el que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho". Miguel de Cervantes.

sábado, 2 de marzo de 2013

A caballo en corveta

Plaza de Oriente. Monumento a Felipe IV. Madrid


A poco que se pasee por algún jardín, parque, plaza o avenida madrileña, encontraremos esculturas ecuestres que nos recuerdan personajes históricos para su imperecedera memoria.

Según las “crónicas”, el monumento ecuestre más admirado de Madrid es el situado en la Plaza de Oriente, el de Felipe IV sobre caballo levantado sobre las patas traseras (en corveta), tomada la idea de la gran obra de Velázquez y realizada en bronce por el florentino Pietro Tacca en 1640, con cálculos estructurales sobre su centro de gravedad, sugeridos por Galileo Galilei, concluyéndolos en macizar la parte trasera y hueca la delantera, consiguiendo así, el equilibro necesario. Solución pionera aplicada por primera vez en esta estatua ecuestre de Felipe IV.


Su pedestal, de granito, centrado en un gran conjunto, está profusamente decorado con esculturas y relieves, cuyos autores son grandes artistas del siglo XIX, terminado en 1843. Sus dos frontales contienen sendas fuentes en forma de concha en las que una alegoría de rio –un anciano- vierte agua. Guardadas estás por cuatro leones de bronce y por conjuntos, símbolos de Fortaleza y Sabiduría. En las caras oriental y occidental se sitúan dos lápidas con inscripciones alusivas a la inauguración del monumento, promovido por la reina Isabel II.








Monumento al General José de San Martín. Parque del Oeste. Madrid


De un lugar emblemático y por tal, concurrido, pasamos a otro, recoleto y ocasional como es el del Parque del Oeste -junto a Moncloa y frente al Museo de América- con su escultura al general argentino José de San Martín.

También a caballo en corveta, obra en bronce (1960) del francés Louis-Joseph Daumas, es réplica de la del argentino Luis Perlotti, ubicada en Buenos Aires. Sobre pedestal de granito, contiene dos relieves en bronce de escenas militares de este general, reconocido héroe de la independencia suramericana

Dejo aquí las consabidas imágenes de ambas esculturas, prometiendo ofrecer otras –también ecuestres- de mis paseos madrileños.








1 comentario:

Antonio Banús dijo...

Muy buenos ambos dos unidos.
Me tienes que enseñar a fotografiar monumentos. A mi se me da fatal
Un abrazo